De Armando de Linares

                                      Cartagena (Murcia), 18 de septiembre de 18991

Sr. D. Emilio Zola

Señor y Maestro:

En pliego aparte, me he permitido enviaros unos ejemplares del periódico en que se ha publicado un artículo mío sobre el proceso de ese gran mártir de la Verdad, a quien Vos tan heroicamente defendéis.2

Yo os ruego que hagáis conocer a los Sres Demange, Labori, Picquart y Dreyfus y al director de l’Aurore mi modestísimo trabajo, como prueba de que en esta desgraciada España, siempre generosa, hay completa unanimidad en la admiración hacia Vos y hacia vuestros ilustres compañeros3 en defensa de la Justicia y la Verdad.

Haced llegar hasta Madame Dreyfus4, esa Cornelia5 de los modernos tiempos, nuestro homenaje de admiración y respeto; y hacia vuestro defendido, la expresión de nuestra convicción sincera y profunda de su inocencia, de su lealtad y de su patriotismo acrisolado en las tristes soledades de su prisión.

Aceptad el testimonio de admiración grande y sincera que os profesa vuestro s.s.

Q.s.m.b.

Colección: I.T.E.M.-C.N.R.S. Centre d’études sur Zola et le Naturalisme.

1. «Adresse: 10, place Risneño».

2. En la colección CNRS no se guardan dichos ejemplares.

3. Zola también tiene siempre presente a sus compañeros. Habla en plural cuando, este mismo 18 de septiembre, escribe a Albert Laborde refiriéndose a la amnistía como injusticia para el inocente, que se mide entonces con el mismo rasero que el culpable: «[…] une amnistie, passant l’éponge, mettant dans le même sac les coquins et les honnêtes gens. N’importe! nous vaincrons, cela est pour moi hors de doute.» (Ver Zola, Correspondances, Tomo IX, ed. dirigida por B. Bakker, Presses de l’Université de Montréal-Editions du CNRS, p.539.)

El 19 de septiembre Dreyfus es indultado por el presidente de la República, Émile Loubet. El 21 de septiembre el general Galliffet, ministro de la guerra,se dirige al ejército para declarar que el caso está cerrado.

4. El 22 de septiembre Zola publicaría en L’Aurore: «Lettre à Madame Alfred Dreyfus».

5. Cornelia, hija de Escipión el Africano y madre de los Gracos (c. 189-c. 110 a. J.C). Es considerada como modelo de madre romana. Hacia 153 quedó viuda de Tiberio Sempronio Graco; rechazó la corona de Egipto para dedicarse al cuidado y educación de sus hijos, los que luego se conocieron como “los Gracos”.